Cómo nace "Misterios..."

Según Manel...

Carlos me envió unos textos. Se trataba de unos micro relatos en los que, al llegar a la última línea, el lector se daba cuenta de que lo que acababa de leer tenía un sentido completamente diferente al que él había imaginado.

Eran duros, serios pero con un tono de humor negro profundo y sutil. Y la muerte, o su inmediatez, protagonizaba muchos de ellos. Me parecieron tan sugerentes que, como ejercicio, dibujé alguno. Por la propia naturaleza engañosa de los cuentos, no podía ilustrarlos sin más, debía ofrecer un punto de vista diferente en el que los textos de Carlos viajaran sobre los dibujos con la cadencia de un relato gráfico que desembocara en la sorpresa final sin que las ilustraciones la delataran. Un tebeo, vaya.

Le envié las páginas –entonces aún vivía en Bruselas- y le gustaron lo suficiente como para emprender conjuntamente la elaboración de este libro.

“Enigmas del Más Acá” me ha permitido utilizar, experimentar, combinar y juguetear con instrumentos, técnicas y diseños un tanto dispares. Cada cuento me sugería un aspecto gráfico: más cercano a la caricatura o al realismo, más colorido o en blanco y negro, más sobrio o más complejo; todo ello dentro de mis capacidades gráficas, que tampoco son tan amplias. Lo cierto es que cada una de ellas resultó una aventura en la que procuré complementar, reforzar si era posible, el contenido de unos relatos sorprendentes en todos los sentidos.

Según Carlos...

Me propuso Manel un día el extraño experimento de ilustrar algunos micro relatos que en momentos de lúcida soledad pergeñaba en las grises tardes de Bruselas. Para mí, una monstruosidad: el micro relato debe estar autocontenido y, según mi propia visión de los mismos, debe sorprender. Ilustrar aquello que el autor pretende que el lector dibuje con su imaginación (y que le induzca a equivocarse) era destruir el concepto mismo de esas pequeñas obras. Esta propuesta contra natura no me sorprendió mucho de Manel, pues me tiene acostumbrado a estas extravagancias

Hasta que vi sus dibujos. No añado más a lo que él mismo ha dicho antes al respecto, porque solo podría estropearlo.

Convencido por fin, tras dos minutos de dura discusión, de que la experiencia prometía, nos lanzamos a un febril intercambio de historias y dibujos que culmina en el “Misterios del Más Acá que aquí se publica.

¿Lo esencial?: Hay muchas más preguntas, e incluso algunas respuestas, de este lado de acá.